Hemos visto que las nuevas tecnologías han cambiado muchas cosas, principalmente la manera en que nos comunicamos. Nos ha permitido navegar, comprar o publicar constantemente en línea. Durante los últimos cinco años la lectura se ha incrementado, por lo que se cree que las revistas siguen siendo un complemento ideal.
Las revistas hacen lo que internet no puede, por lo que no hay que apresurarse por la rapidez de las noticias. Las revistas generan conexiones más profundas, crean relaciones y cautivan de diferente manera generando experiencias que los medios digitales no pueden hacer. Por ejemplo, una moda jamás se apreciará igual en papel que en pantalla.
El poder de las revistas se extiende a la publicidad y las relaciones públicas. Son el medio principal que induce a la compra o recomendación de cualquier categoría de producto o a la pertenencia de ciertos grupos sociales.
A diferencia de hace cinco años la lectura ha ido incrementando, incluso el segmento de 18 a 34 años, continúa creciendo, y el joven adulto lee más por mes que sus padres. Por lo tanto, los medios digitales y los impresos han creado una alianza para el fomento de la lectura ya que hoy en día es imposible imaginar a una revista, por dar un ejemplo, sin sus soportes digitales como: portales, aplicaciones, revistas en línea o redes sociales.
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